Merece la pena bolsa Billingham?

miguelae escribió: Ya lo tengo, creo que he captado el mensaje! Adjunto imagen:

Más o menos. Lo importante es poder brujulear.

Se puede creer o no, a mí me da lo mismo. Yo he visto pararse en seco a un manguta y disimular contra un escaparate al paso de una Leica. No era yo quien la llevaba. Ese turista se salvó por dos cosas: la mirada que le fijé al amigo de lo ajeno y que avisé al de la Leica.
Y saben perfectamente lo que es una Leica, una Canon, una Nikon... de las caras.
Para que os hagáis una idea: en Cuba el tráfico de cámaras de primera en el mercado negro está a la orden del día. Todas son robadas, todas.
Allí no entra una cámara decente desde 1950 salvo que seas alguien en política. Los de la prensa se tienen que buscar la vida con lo que les dan y si quieren destacar sobre sus colegas ir al mercado negro.
Cuando una M8 valía aquí cuatro o cinco mil euros, en la isla costaban entre mil y mil quinientos, que allí es una fortuna (un médico gana unos 25 euros al mes). Alguna vez me han ofrecido mercancía de esa clase. Nunca la he comprado, claro está.
Un picota será tonto y andará ciego buscando 20 euros para la dosis pero los que se dedican a las cámaras, os aseguro que entienden.
Con las bicis de montaña ha pasado igual en más de una ocasión: esperaban a los chavales en la Casa de Campo, al final de una cuesta, y sólo se llevaban las caras. Vaya si entendían.

¿Cómo pensáis que pudo hacer Koudelka su Gypsies? ¿Vestido de El Corte Inglés?
¿O Petersen su Café Lehmitz? ¿O Hara sus series sobre los homeless en Londres y la mili en tiempos de Franco?
Primero: una Leica vieja, gastada y makeada. Nada de bolsas fotográficas. Un atuendo tan acorde con la situación, el barrio, la gente, etc, que de ninguna manera llames la atención por nada. Por nada.
Naturalidad en el caminar, el actuar y la gestualidad. Nada de miradas subrepticias, gestos nerviosos, etc.
Regla de oro: no sacar la cámara del bolsillo hasta que te hayas convertido en un objeto más de la calle, del bar o de donde estés. O que los interesados confíen en ti y les importe una m... que hagas fotos.
Yo he hecho una boda gitana (todo menos las tres rosas, claro está). Y he podido hacerla sin riesgo alguno y con la gente encantadísima. Pero me lo trabajé varios años previamente con una familia del mercadillo.
En fin, que ya no son tiempos como los de HCB en los que se podía ir por el mundo con traje y corbata tomando fotos a diestro y siniestro.