reflexión

Compañero fotogramos, todos nos equivocamos y Cartier Bresson no iba a ser menos.

La mirada, los gestos, los objetos en segundo plano o en movimiento e incluso el viento, pueden cambiar una fotografía completamente, cuantas veces unos ojos cerrados un mal gesto pueden estropearnos una imagen.

Puede parecer una tontería pero, a veces, el disparo en ráfaga puede marcar la diferencia entre una foto lograda y una fracasada. Esos detalles nimios de los que depende el éxito de una buena foto a veces se resuelven con el disparo en ráfaga.

Evidentemente para la fotografía deportiva o con mucho movimiento el disparar en ráfaga tiene muchas ventajas: te permite obtener múltiples tomas a la vez y así poder decidir con cuál quedarte (a veces el problema posterior es el saber cual elegir de las tomas en ráfaga).

No necesitamos disparar en ráfaga siempre yo no la utilzo practicamente nunca pero, puestos a elegir si la situación lo requiere ¿por qué no tener varias tomas de cada disparo y así poder escoger la mejor?.

Yo siempre respeto el analógico, cada cual que haga lo que le dé la gana, faltaría más. Yo opino como cualquiera. Los químicos se disuelven y no se ven, los plásticos son sólidos y a la vista está. El monitor y el ordenador hace que no se necesite tanto papel (celulosa) así se evitan cortar más arboles de los que ya se cortan (deforestación), los arboles son nuestros 2 pulmones. Yo no hago ni catedra ni axiomas, solo es una opinión. Que tu hagas pases de diapositivas con proyector, debes de ser el último moicano. Yo cuando voy a fotografiar por los centros turísticos de Barcelona, el 99,99% llevan cámaras digitales, ver alguien con una analógica es muy difícil, aunque reconozco que alguna he visto. Ya estoy con la cacharrería otra vez y los ataques de GAS y me gusta la Fuji XT30. Saldrá dentro de 1 mes. Yo voy de buen rollo, que nadie me malinterprete. Cada uno es libre de dar una opinión.
Saludos.