Por fin

Finalmente alguien se ha atrevido: el "derecheo" del histograma es una pollada o, en el mejor de los casos, un mero juego semántico. Exponer bien es exponer bien, sea a la derecha, a la izquierda o en el centro. Todo lo demás es todo lo demás.

lenney escribió: Brandt este es el sitio y el momento para que nos cuentes tus truquillos de profesional para hacer una buena exposicion sobre todo en fotografia callejera.

Acabo de llegar a casa y es tarde. Quedo emplazado a ello pero advierto que son muy simples.

Imagino que te refieres, amigo Lenney, a una exposición para digital pues trabajando en analógico y b&n las cosas son un poco diferentes.
El color, incluso en digital, es más crítico que el b&n. En éste último aceptamos con naturalidad que una alta luz esté quemada siempre que el asunto protagonista de la imagen esté bien expuesto. En color no sólo requerimos que el personaje o asunto esté bien expuesto sino que también nuestra vista exige que todo esté compensado y sin quemar.

Nuestro ojo es un instrumento maravilloso y no se ha podido, todavía y seguramente en mucho tiempo, imitar en fotografía algo ni remotamente parecido: en una situación de alto contraste somos capaces de ver simultáneamente "en su sitio" las zonas iluminadas y las zonas en sombra. Digamos, pues, que una fotografía es una abstracción y tendremos dos caminos a la hora de procesar esa imagen en el ordenador: tratar de llevarla "a lo que vimos" o dejarnos arrastrar por la propia expresividad de la foto. Hay fotógrafos de una y otra tendencia aunque lo más natural es que se produzcan situaciones "impuras" o cruzadas en la mente del fotógrafo, tratando en algunos casos de ser fiel a lo que vio o en otros de primar la expresividad por encima de todo.

Yo me encuentro en esa situación que llamo "impura" y no siempre me guio en el procesado de la imagen por lo que inicialmente vi, aunque sea lo más habitual en mi caso. A veces tomo otro camino, bien porque me seduce algo de la imagen (generalmente el claroscuro) o bien porque, tal y como se expuso, la imagen no permite volver a lo visualizado, extremo éste que suele ser el más habitual.

Pero al loro, hecha la advertencia previa de que el c olor es asunto delicado que tiene sus exigencias que le son propias. Trabajando en color hay un par de maneras de proceder y ambas conducen a buenos resultados en la exposición (olvidemos derecheos, hablamos de exponer bien):

-Olvidarse del fotómetro de la cámara, colocar los controles en manual y utilizar un pequeño fotómetro de luz incidente midiendo en la zona de luz con la lumisfera apuntando hacia la fuente luminosa, o dirección principal de la luz. Es una técnica que da muy buen resultado cuando vamos a trabajar en un ámbito controlado, en una zona de luz repetitiva. Imaginad un mercadillo, por ejemplo: luces y sombras van a ser todo el tiempo las mismas o muy parecidas. O en un día cubierto, cuando la luz es uniforme. La luz incidente, cuyas ventajas no me cansaré de repetir tanto en blanco y negro como en color, nos libera de los detalles accidentales que confunden al fotómetro de cámara, que es un fotómetro -no podría ser de otra manera- de luz reflejada.

-Si tomamos fotos ocasionalmente, en zonas de luces y sombras diferentes cada vez, como a menudo ocurre en fotografía callejera, lo más sencillo es usar el fotómetro de cámara pero con unas premisas a priori que debemos conocer bien para no equivocarnos demasiado. Hay que saber que el color agradece siempre -como antes indiqué- que las luces tengan su valor y color lo más exactos posible. Hay pues que prestar especial atención a las luces, dejando que las sombras se vayan. Luego intentaremos recuperarlas o no, dependiendo de nuestro estilo fotográfico o de nuestras preferencias para esa imagen concreta. Hay que advertir que no da buen resultado buscar, en las situaciones de alto contraste, la luz más alta de todas pues esa zona quedará bien expuesta pero el resto de la imagen se nos habrá ido por completo. ¿Cómo hacer? Busca con los ojos, visualiza una zona que sea aproximada a un gris medio (al gris 18% de la carta Kodak o el que también nos dará la lectura incidente) o, en su defecto, una zona iluminada que esté un par de pasos completos por debajo de la luz más alta. Hay que colocar la cámara en modo con prioridad a la abertura y tenerla configurada para que, a medio recorrido del botón disparador, retenga los valores de exposición (la Leica M9 viene así de fábrica, en otras hay que configurarlo). Mide sobre esa zona, retén los valores de exposición, reencuadra y dispara. Si no estás muy seguro y el tema o asunto lo permite, considera un par de zonas o tres y dispara para ellas.

Suelo utilizar mucho más, si estoy trabajando en color, éste segundo método pero debo decir que no me resulta difícil la traslación imaginaria del color a zonas de blanco y negro.

En los dos últimos meses me he peleado mucho con el libro de Mellado, un fotógrafo cuya fotografía no me interesa nada -efectista, relamida, archisabida y manida y más falsa que un euro de plástico- pero de cuya técnica mucha gente que me merece crédito habla maravillas. He encontrado que las cosas que dice de la exposición no funcionan salvo en situaciones de luz muy controlada -bajo contraste, generalmente- y él mismo confiesa que, ante situaciones de muy alto contraste (como las que tenemos en el Sur y Mediterráneo durante largas temporadas al año) lo que suele hacer es tomar dos fotos (una para las luces y otra para las sombras) y ensamblarlas en Photoshop, lo que equivale a un HDR hecho manualmente.

Lo que sí he visto en Mellado es que se trata de un gran photoshopista, un programa que conoce a la perfección -la parte que nos interesa a los fotógrafos- y eso está bien y es muy de agradecer que se publique. Otra cosa es que personalmente no me gusta manipular demasiado las imágenes ni la cosmética aplicada sino que trato de hacer con ellas lo que haría si estuviera tratándolas en el laboratorio analógico, es decir, unas operaciones básicas de quemados y tapados. Para ello he encontrado que un plugin de Photoshop del que ya he hablado aquí, Viveza 2 de Nik Software, me permite hacer lo que quiero de modo muy rápido y sencillo, sin perder horas en el post-procesado. En definitiva: oscurecer algunas zonas y aclarar otras. De eso se trata.

oronet commander escribió: Totalmente de acuerdo con las opiniones sobre Mellado vertidas por Brandt. No sólo su tipo de fotografía no me interesa nada sino que creo que su libro ha hecho mucho daño en la fotografía amateur. Justamente en un colectivo donde el criterio no está tan pulido como el de un experto tanto efectismo y artificialidad hace estargos.

En cuanto al derecheo, creo que es una herramienta más, útil en condiciones de tranquilidad y luz bastante controlada, pero que lleva a la pérdida de muchas fotos por descuido o mala aplicación.

Exacto. Creo que el derecheo paga dividendos en la fotografía de paisaje, al amanecer y al atardecer, siempre que no haya demasiado contraste. Si lo hay es mucho mejor, me parece, echar mano de los filtros degradados ND de Lee, una forma de exponer correctamente cielo y tierra si ambos son importantes en la composición.